martes, 5 de diciembre de 2017

ACUEDUCTO


Metáfora perfecta de la vida. Luces y sombras que escapan. Luces y sombras sobre nosotros, sobre nuestra existencia. Felicidad efímera de un viaje de invierno, porque como dijo algún sabio todo lo bueno se acaba, y se quedó tan ancho. Luces de otoño invernal colándose entre piedras milenarias. Ya no soportan agua pero si la historia de una ciudad atada a sus arcos.Para los menos profundos irás siempre atado a una lata de fabada.

LA ÚLTIMA PRINGÁ

 Extraña sensación la de decir que tienes que ir a un bar a comerte un montaito antes de que cierre el domingo y que el camarero descendient...